Brodis ha llegado para redefinir el concepto del kebab, mostrando que un plato rápido también puede ser sabroso, honesto y de calidad superior. Este restaurante, situado en el corazón de la calle Manuela Malasaña, va más allá del kebab tradicional al ofrecer una propuesta fresca y casera con un enfoque diferente y auténtico. Aquí, la idea es que te sientas como en casa, disfrutes de un ambiente acogedor y degustes un kebab “a tu rollo”, adaptado a tus gustos y preferencias.
El kebab reinventado: una fusión de frescura y tradición
Brodis se distingue por su innovadora interpretación del kebab, manteniendo su esencia pero elevando el concepto a algo mucho más cercano a una experiencia mediterránea. En Brodis, el kebab se convierte en el “rollo”, una presentación fresca y ligera que lleva este clásico a un nivel completamente nuevo. Cada “rollo” es una mezcla deliciosa de ingredientes frescos y naturales, todos seleccionados por su calidad, y preparados de forma casera para preservar su valor nutritivo.
En palabras de sus creadores, este es un lugar “donde el pollo es pollo y la ternera es ternera”, y donde cada ingrediente cuenta con su propia historia. Con esta propuesta, Brodis se posiciona como un restaurante donde la comida rápida es también saludable y sin compromisos en sabor o calidad.
Una carta con sabor casero y variedad de opciones
La carta de Brodis destaca por su originalidad y el cuidado en cada plato. En cada “rollo” se encuentran elementos cuidadosamente seleccionados: pan libanés crujiente, carne de pollo o ternera marinada con la receta secreta de la familia, arroz tostado, y una variedad de crudités como lechuga, tomate, lombarda y pepino encurtido en el propio restaurante. Todo se adereza con la especialidad de la casa: una salsa blanca cuya receta es uno de los secretos mejor guardados de Brodis.
Para quienes prefieren evitar el pan, Brodis ofrece la opción “sin rollo”, en la que los ingredientes se sirven en plato, lo cual permite disfrutar del sabor completo de este kebab sin incluir harinas.
Además, los entrantes de Brodis son un atractivo en sí mismos: su falafel artesanal con salsa tahini y su tabulé (una ensalada de couscous con tomate, cebolla roja, hierbabuena, perejil, comino y limón, acompañada de endivias) están pensados para acompañar los “rollos” o disfrutarse solos. Tampoco faltan los hummus caseros, disponibles en las variedades de garbanzo y calabaza. El hummus de calabaza, en particular, es una receta familiar que destaca por su toque especial de mango, creando una explosión de sabores únicos y memorables.
Salsas y aderezos artesanales que hacen la diferencia
Uno de los aspectos que diferencia a Brodis es su dedicación a la producción artesanal de sus salsas, encurtidos y aderezos. Todo es preparado en el propio restaurante, asegurando que cada plato mantenga su frescura y sabor natural. Esta atención al detalle aporta un toque distintivo, un sabor único que hace que los clientes deseen repetir una y otra vez.
Cada “rollo” y “sin rollo” ofrece un equilibrio entre lo tradicional y lo actual, logrando una propuesta saludable y moderna sin sacrificar el sabor. Brodis se convierte así en una alternativa ideal para quienes buscan una experiencia gastronómica que equilibre el placer de la comida rápida con opciones nutritivas y llenas de frescura.
Comida para llevar y un ambiente acogedor
Aunque la propuesta de Brodis está pensada principalmente para llevar, su sistema de packaging innovador asegura que cada plato llegue en condiciones óptimas a su destino, práctico y sin complicaciones. Sin embargo, aquellos que prefieren disfrutar de su comida en el local encontrarán un ambiente urbano y cuidadosamente diseñado, que invita a relajarse y disfrutar de la experiencia.
Con su estilo moderno y un toque acogedor, Brodis se convierte en el lugar perfecto para disfrutar de un buen “rollo” en el centro de Madrid. Cada rincón del restaurante está pensado para que te sientas cómodo, ya sea compartiendo con amigos, tomando un descanso durante el trabajo o simplemente disfrutando de un momento especial.
Un concepto gastronómico que va más allá del kebab
En esencia, Brodis es mucho más que un restaurante de kebabs. Es una propuesta que apuesta por la frescura, la calidad y la originalidad en cada plato. Sus “rollos” son honestos, sabrosos y saludables, ofreciendo una experiencia gastronómica que no compromete el bienestar de quienes lo eligen.
Para sus fundadores, Brodis es un espacio de buen rollo, donde los clientes forman parte de la historia del lugar. Es ese momento de desconexión en el que disfrutas de la comida mientras lees un mensaje especial, compartes con amigos o simplemente te tomas un descanso.
En definitiva, Brodis es un concepto fresco, urbano y auténtico que redefine el kebab en Madrid, invitando a todos a experimentar su propia versión de este popular plato. Para aquellos interesados en conocer más, la experiencia de Brodis está disponible en su local de la calle Manuela Malasaña y en su sitio web: www.brodiskebab.com.
