Palencia, una joya escondida en la llanura de la Tierra de Campos, es mucho más que una capital de provincia en Castilla y León. Con una rica historia que se remonta a la época de los vacceos, esta ciudad ofrece una combinación única de patrimonio cultural, paisajes impresionantes y una gastronomía que cautiva a cualquier visitante.
Un Viaje al Pasado: La Historia de Palencia
Palencia, cuyo nombre proviene del antiguo poblado vacceo de Pallantia, es un reflejo de la mezcla cultural que ha moldeado esta región. Los vacceos, una tribu celtíbera conocida por su organización militar y sus conocimientos agrarios, dejaron una huella indeleble en la zona. El topónimo Pallantia, con raíces indoeuropeas, sugiere una conexión con la naturaleza, posiblemente significando «mesa» o «cerro amesetado», en referencia al paisaje característico de la región.
Clima y Naturaleza: El Escenario Perfecto para la Vida y la Producción
El clima de Palencia es tan diverso como su historia. A pesar de su ubicación en el interior, el clima mediterráneo continentalizado de la ciudad muestra influencias oceánicas gracias a su proximidad al mar Cantábrico. Esto da lugar a inviernos fríos, con temperaturas que pueden llegar a los 14 °C bajo cero, y veranos moderados donde rara vez se superan los 36 °C. Este clima, combinado con la riqueza de su suelo, crea condiciones ideales para la producción agrícola y ganadera, como la cría de la oveja churra, cuya carne es reconocida bajo la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Lechazo de Castilla y León.
Gastronomía: Sabores Auténticos de la Tierra
La gastronomía de Palencia es un reflejo de su rica tradición y su compromiso con la calidad. La oveja churra, mantenida y mejorada por la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Ovino Selecto de Raza Churra (ANCHE), es una pieza central de esta oferta culinaria. Su carne, protegida bajo la IGP Lechazo de Castilla y León, y su leche, utilizada para la elaboración de quesos, son productos de una calidad excepcional.
Entre los quesos más destacados, encontramos el Queso Campos Góticos, elaborado con leche cruda de oveja y cuajo animal del lechazo. Este queso, disponible en versiones semicurada, curada y añeja, se caracteriza por su sabor intenso y su textura única, resultado de un proceso de curación tradicional en ambientes fríos y húmedos.
Otra joya gastronómica es el Lechazo Asado Premium, un producto innovador desarrollado en el Gastro-Espacio del Ovino en Paredes de Nava. Este centro, situado en un antiguo pósito de cereal del siglo XVI, es un lugar de interpretación cultural y gastronómica que busca preservar y elevar la tradición ovina de la región.
Productos Tradicionales: La Morcilla de Villada y los Socorritos
La Morcilla de Villada, elaborada por generaciones en el corazón de Tierra de Campos, es otro ejemplo de la rica herencia culinaria de Palencia. Este embutido, hecho con cebolla rehogada, ha sido adaptado a los tiempos modernos con la creación de una crema de morcilla lista para consumir, lo que demuestra cómo la tradición puede fusionarse con la innovación.
Por último, no se puede dejar de mencionar los Socorritos, un dulce tradicional de la repostería palentina. Estos lazos, que hoy también se encuentran bañados en chocolate o en forma redonda, son una delicia que acompaña perfectamente cualquier visita a la ciudad.
Lugares Imperdibles y Curiosidades
Palencia también ofrece una serie de sitios históricos y naturales que son testimonio de su rica herencia. Desde la Villa Romana La Olmeda hasta el Castillo de los Sarmiento y la Catedral de Palencia, cada rincón de la ciudad cuenta una historia. Entre las curiosidades, destaca que Blanca de Castilla, madre de San Luis y reina de Francia, nació en esta ciudad.
Su rica historia, su variada gastronomía y sus paisajes únicos la convierten en un destino obligado para aquellos que buscan una experiencia auténtica en el corazón de Castilla y León