Jaén, la capital de la provincia homónima, es un rincón singular en el corazón de Andalucía. Conocida como la «Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Jaén, Guarda y Defendimiento de los Reinos de Castilla» y la «capital del Santo Reino», esta ciudad no solo destaca por su rica historia y patrimonio, sino también por su vibrante vida cultural y sus tradiciones arraigadas.
Un Entorno Natural y un Clima Distintivo
Ubicada al pie del cerro de Santa Catalina, Jaén se encuentra rodeada de fértiles tierras de cultivo y extensos olivares. Al sur y sureste se extienden las sierras de Jaén y Jabalcuz, mientras que al norte, el llano del río Guadalbullón ofrece un paisaje contrastante. El clima mediterráneo continentalizado de Jaén, con inviernos suaves y veranos calurosos, es ideal para el cultivo de olivos. La amplitud térmica y las escasas lluvias estivales definen el carácter del entorno, que los locales conocen bien como «el clima de los olivos».
Patrimonio Histórico-Artístico
Jaén es un tesoro de monumentos históricos. La Catedral de la Asunción de la Virgen y el castillo con sus tres alcázares son testigos de su pasado glorioso. Los Baños Árabes y el Museo Internacional de Arte Íbero también enriquecen su oferta cultural. En la plaza de las Batallas, el Monumento a las Batallas conmemora la victoria en las batallas de Las Navas de Tolosa y Bailén, dos eventos cruciales en la historia de España.
Leyendas y Tradiciones
La ciudad tiene su propia mitología, como lo evidencia la leyenda del Lagarto de Jaén, que se dice es una maldición por la forma de dragón que tiene la ciudad. Entre las tradiciones más coloridas están los Melenchones, donde la gente baila en corro alrededor de una hoguera, y la festividad del «Pastira», el traje típico de Jaén. La Semana Santa y la Feria de San Lucas son eventos destacados en el calendario festivo.
Aceite de Oliva: El Oro Líquido de Jaén
Jaén ostenta el título de «capital mundial del aceite de oliva» y su territorio produce la mayor cantidad de aceite de oliva virgen extra (AOVE) en el mundo. Los aceites mono varietales, como Picual y Manzanilla de Jaén, son especialmente apreciados por sus aromas a aceituna limpia y fresca. Empresas como Castillo de Canena, dirigidas por los hermanos Rosa y Francisco Vañó, representan la excelencia en la producción de AOVE. Con más de dos siglos de historia, Castillo de Canena ha evolucionado para convertirse en un referente mundial en aceite de oliva virgen extra premium, destacando por su compromiso con la sostenibilidad y la calidad.
Artesanía y Cultura
La artesanía es otra piedra angular de Jaén. Pablo Tito, un ceramista de Úbeda, ha mantenido viva la tradición alfarera de su familia utilizando uno de los pocos hornos hispanos-árabes en España. Su trabajo no solo conserva técnicas ancestrales, sino que también contribuye al patrimonio cultural de la región. Recientemente, ha sido incluido en la “Homo Faber Guide” de la Fundación Michelangelo, un reconocimiento a su maestría.

Gastronomía Local
La gastronomía de Jaén refleja la riqueza de sus tierras. Platos como las migas ruleras y la pipirrana, una ensalada refrescante, son muy representativos. Los dulces locales, como almendrados y torrijas, completan la oferta culinaria de la ciudad.
Desde la majestuosidad de sus monumentos hasta la calidez de sus festividades y la riqueza de su gastronomía, Jaén ofrece una experiencia única en el corazón de Andalucía.